Fecha estelar...

He comenzado este blog gracias a la sugerencia de un amigo, con ello pretendo dos cosas: compartir mis experiencias y pensamientos con los que más quiero y comenzar un diario donde escriba aquellas pequeñas cosas e ideas que en el monto total del tiempo de pierden. Sé que lo váis a hacer, pero quiero dejar muy claro que no dejan de ser mis sentimientos por escrito, y no quisiera ningún comentario desagradable.

martes, 18 de diciembre de 2012

Me llaman el mesías porque no me quedan meses sino días…


Mae mía¡¡¡¡¡ cuatro días para coger el avión e irme de vacaciones a casa. Es la primera vez que digo eso “de vacaciones a casa”. Estoy tan emocionao joder¡¡¡¡ y esto de tener fecha y hora es mortal, porque los días se pasan muy rápido, pero las horas se me hacen eternas, no sé si plasmo bien la sensación.
Es muy curioso, ahora ando de preparativos para la vuelta, haciendo una maleta que apenas si lleva mis cosas, porque no llevo casi ropa, ni calzado, ni recuerdos… es más bien la maleta de un comercial, llevo cosas para dejar y luego otras distintas para traer. Aunque igualmente llevo mucho peso, tengo que tener cuidado de no pasarme de los 23 kg que me deja Orbest.
Despedidas, abrazos y hasta prontos… estos días los tengo apurados con eso, y es que aquí casi sin darme cuenta he hecho una pequeña familia en esta bendita isla. El fin de semana fue el último que pudimos pasar Inma y yo juntos, ayer cenando con las hermanas, esta semana me veré con Ana Santana y con Ana Belén otro día. Nos veremos de nuevo en enero claro, pero se crean lazos afectivos que nos hacen juntarnos y desearnos todo lo mejor en estos días y justo antes de algo tan importante que es para nosotros, como es estar con la gente que más quieres y te esperan.

Otra decisión importante he tenido que tomar estos días. He comunicado que esta es mi última semana en la empresa con la que decidí quedarme en octubre y lo cierto es que no ha caído del todo mal, creo que están acostumbrados a que la gente vaya y venga un poco alegremente. También tengo que reconocer que no les he dicho la verdad completa, no saben que me voy con otra empresa del sector del aluminio, piensan que me voy con los Salesianos. Aún no sé si el puesto para el que me han hecho la prueba los salesianos saldrá adelante o no, pero va para despacio, así que de momento cuando vuelva de España, comenzaré a trabajar con la otra empresa que me ofreció un puesto en septiembre y lo demás el tiempo lo irá diciendo.




Si hay algo que estoy aprendiendo aquí, es que la realidad en la que me veo es otra, y que las seguridades que tenía en España aquí no las tengo. Eso va con sus pros y sus contras, pero por hablar solo de los pros, uno es que cuando aquí elijo por la opción que creo más conveniente, nunca tienes suficiente seguridad, pues cuando he cambiado de trabajo en Valdepeñas, siempre conoces algo de donde vas a ir, o a alguien que trabaja allí, aquí tienes que dejarte llevar por instinto y si te equivocas, pues asimilar que también es nuestro derecho el equivocarnos, y que aquí de momento cuento con una fortuna, que es que sigo teniendo ofertas laborales y puedo seguir aprendiendo y haciéndome un hueco en el país, como he hecho hasta ahora.
Que me gustaría trabajar en el área de lo social?? Claaaaaro, pero de momento voy a seguir con la opción de esta nueva empresa y vamos a ver qué tal. Si no, siempre me quedará volver a España y retomar el paro.

Pronto todo lo que estoy escribiendo podré decirlo a plena voz y a la cara, y podré dar esos abrazos y besos que tanto me apetecen y a tanta gente… DIOS QUÉ GANAS TENGO DE QUE ESE AVIÓN ATERRICE¡¡¡¡¡¡¡¡

lunes, 19 de noviembre de 2012

Un poco de como yo veo la historia dominicana...


Creo que ya he comentado en más de una ocasión lo que me llama la atención la identidad cultural del pueblo dominicano, el cómo se ha inventado a sí mismo y se ha constituido como nación, tal y como cada una de las antiguas colonias tuvo que hacer, pero con unas particularidades propias del dominicano. Pero es que nunca dejas de descubrir a esta gente y de intentar aprender el por qué de su realidad y el de su forma de pensar y actuar. También es cierto que el reto sería grande y que no soy ni historiador ni antropólogo para ello, pero me gusta leer, escuchar y no verme callao jejejeje.

El caso es que el español tenemos nuestra historia, nuestra ascendencia entre fenicios, romanos, godos, árabes, etc… que nos han ido construyendo como lo que ahora somos, pero el dominicano es un pueblo curioso, que en la mayoría de las ocasiones comienza a contar su historia a partir de la colonización, sin mencionar las huellas que los taínos dejaron en la isla. El pueblo taíno que se extendía a lo largo de todas las Antillas, provenía de la parte de Venezuela y se regó por todo este archipiélago en cayucos. Según he leído y me han contado, pueblo pacífico en su mayoría que tomaba de los frutos de la tierra lo que la madre naturaleza le daba, y es que en esta bendita isla no hay que esforzarse mucho para sembrar o recoger. Existían también guerreros, incluso mujeres guerreras que se forjaron leyenda de “mujeres de pelo moreno y largo que andaban hacia atrás y devoraban hombres”, pero en general y como pudo escribir Colón en una de sus primeras cartas al llegar a la isla, gente de paz y bien. Pero la llegada del español trae consigo la desaparición de esta raza, unos muertos por las enfermedades traídas de occidente, otros por la esclavitud a la que se vieron sometidos por los primeros colonos. Al desaparecer tan rápidamente, los colonos tuvieron que traer mano de obra esclava desde África para cultivar sobre todo la caña de azúcar, comercio que mantuvo la isla de la Española durante mucho tiempo. Y justo en este momento es donde comienza a forjarse una idea de nación o país. En Haití no hubo apenas mezcla entre colonos europeos y esclavos africanos, pero en la parte de Dominicana los españoles comenzaron a procrear hijos en su mayoría no reconocidos y que seguían habitando el país como mestizos.

No me quiero distraer de la idea con la que quería dejar esta entrada, así que me adelantaré un poco en el tiempo para luego retomarlo donde lo he dejado en el anterior párrafo, y es que el dominicano tiene una identidad de patria que el español, o al menos yo no tenemos. Arrancados de sus países de origen africanos, esclavizados por españoles, colonizados, invadidos y olvidados por: españoles, franceses, ingleses, Estadounidenses… en el siglo XIX hasta Haití invadió la parte Dominicana durante unos 20 años, siendo expulsados después, marcando a fuego una identidad con sus “Padres de la Patria”. Más de treinta años de dictadura trujillista, de la cual puede decirse que Franco tuvo que enfriar relaciones por el miedo que Trujillo y sus medidas le provocaban. Distintos gobiernos corruptos y distintas realidades que conviven juntas en lo que yo ahora estoy conociendo como República Dominicana.

Por todo lo anterior me llama tanto la atención el que en lugar de tratarse de un pueblo desarraigado de sus raíces, ha creado las propias suyas, renunciando incluso en ocasiones a esa herencia que pudieran dejar los taínos y la misma herencia que ellos pudieron arrastrar de África. Pero es que hay un asunto importante, y aquí me gustaría reenganchar donde lo he dejado, y es que durante el colonialismo, el español siempre tenía como referencia la Patría que había dejado y que de alguna manera siempre volvía, si no físicamente sí tenía un sitio que añorar y al que evocar, mientras que el esclavo africano había sido arrancado de su casa, la cual ni recordaba dónde estaba, y puesto obligado en un nuevo entorno, y lo más importante: sin la posibilidad de volver a un país del que ya casi no recordaba y cuyo acceso a volver era impensable, por lo que agarra lo que tiene y comienza a forjar esa idea de hacer suyo la nueva realidad que tiene por delante, pues no hay nada donde volver, nada a lo que evocar.

Quizá me pierdo mucho en las palabras y en la retórica, pero quería dejar esta idea plasmada también en el blog y compartida con los míos, para intentar comprender entre todos el crisol que hoy por hoy conforma la realidad del país donde vivo.

Si me gusta la música... es por el bombo.


Este fin de semana ha sido el elegido para celebrar mi cumpleaños con Inma. Ella me tenía algo preparado y estuve engañado hasta casi última hora. Se vino conmigo el sábado hasta el hotel y cuando salí de trabajar nos dirigimos hacia Sabana de la Mar, que se encuentra ubicada en el Parque Natural de los Haitises, a un hotel ecológico perdido de la mundana vida de los mortales. Un sitio precioso, un hotel enmarcado entre la montaña y unas cascadas de agua aprovechadas para hacer piscinas naturales. Restaurante, habitaciones, caminos… construidos con mucha cantidad de buen gusto e interés de preservar lo natural. Nuestra habitación era una pasada, decoraciones de roca y hojas, dos camas inmensas, el verdor de la montaña entrando por la ventana y el sonido del agua corriendo continuamente… aquello que alguna gente compra en CD para ponerse por la noche para dormir. (Intentaré pegar un link con la página del sitio).

www.paraisocanohondo.com

La temperatura ha estado genial, ya que nos ha llovido los dos días y el frescor de la roca nos ha permitido arroparnos por la noche, incluso en algún momento parecía que de verdad estábamos en el noviembre de España, porque con esto de que aquí no hay variaciones entre las estaciones, parece que siempre es el mes de junio aquí.

Todo una sorpresa desde el principio, por la novedad, por los pequeños detalles que Inma me ha ido dando, por el sitio, por la compañía… no me suele gustar mucho lo de las celebraciones, pero tengo que admitir que de vez en cuando hay que dejarse “acariciar el lomo” y disfrutar también con ello.

No solo había preparado lo del hotel, sino que también contaba con apuntarnos a alguna de las ofertas de actividades de aventura que se daban, así que así lo hicimos, dando un paseo precioso en Kayak el domingo por la mañana a través del río Cayo Hondo, hasta la pequeña Bahía de San Lorenzo dentro de la Bahía de Samaná y conociendo un par de cuevas donde los taínos vivían y celebraban. Recordaba muchísimo las tardes de piragua con Consoli en el pantano de la Cabezuela, pero como las comparaciones son odiosas no las haré, pues el paraje de los manglares en los Haitises no tiene nada que ver con las cepas de mi pueblo… a cada cosa lo suyo. Intentaré dejar algunas de las fotos que pudimos hacer para que quien lea esto se haga una idea del sitio, pero quizá me quedo corto describiéndolo como un pequeño Paraíso aún no sobre-explotado, donde quien busca naturaleza, tranquilidad y deportes en la naturaleza se puede sentir a sus anchas.

Ah¡¡¡¡¡ que se me olvidaba comentar las comidas en el restaurante: pescado fresco, aderezado con salsas criollas, o frito y rebozado con tostones, y un mangú con cebolla y huevo por la mañana que no se lo salta un gitano. “Bien comío y bien bebío… qué más quieres cuerpo mío”.

Muchas gracias por compartir estas experiencias Inma.












miércoles, 14 de noviembre de 2012

Picotazo va... dengue al canto

Después de casi 9 meses en la isla sin tener una bendita diarrea he pasado un dengue clásico. El caso es que después del último huracán (Sandy) me mojé varios días y durante el fin de semana noté que tenía fiebre, pensé que simplemente había cogido alguna gripe. Los síntomas son muy parecidos: ojos vidriosos, dolor de articulaciones, sudores, malestar general... A los 3 días de no bajar la fiebre me encontraba en la oficina en Bávaro y tuve que ir al hospital pues no había tampoco síntomas de tos o dolor de pecho, por lo que supusimos que podría tratarse del dengue.
Como aún soy nuevo en la empresa no tenía tarjeta de mi seguro médico, así que llamé al seguro que traigo de España y me dijeron donde tenía que dirigirme. Así lo hice y tras rellenar un montón de documentos y una analítica resuelven dejarme ingresado pues es un posible dengue, el cual confirman en los días posteriores. El único tratamiento es suero para la deshidratación (pues entré bastante deshidratado) y paracetamol para bajar la fiebre. Controlaron la fiebre y me tenían monitoreado, porque esos días del dengue son especialmente delicados, pues puede transformarse en un dengue hemorrágico, donde acabas por deshidratarse y tu organismo comienza a tener hemorragias descontroladas. No quiero alarmar porque no fue mi caso, pero hay gente aquí que muere de dengue porque no tiene seguro médico ni forma de controlar este virus, pero vuelvo a repetir que no es mi caso, de hecho no me encontré mal mal a excepción de la fiebre y sus síntomas.

A los cuatro días de estar ingresado me entero de que el seguro internacional no se quiere hacer cargo de los gastos hospitalarios porque dicen que en mi contrato aparezco como "residente en el extranjero" y uno de los requisitos para acogerte a la póliza, es ser residente español. Pero quién coño ha dicho que yo soy residente extranjero, qué sabrá el gilipollas que me hizo el seguro, que el ser o no residente es un estado legal¡¡¡¡¡¡¡¡. Intento hablar con el seguro, pero ha sido el puente de los Santos y casi no puedo hablar con nadie, intento aclarar esta historia lo antes posible, pero Ocaso pasa de mi culo. Además el hospital me dice que como el seguro español no se responsabiliza que me iban a hacer un descuento en una factura a mi nombre, así que solo tendría que pagar 1500 dólares diarios QUEEEEEEEEEEEE??????? coño ni el hotel más lujoso de Santo Domingo¡¡¡¡¡ y yo echando cuentas de cabeza + - x + / yo no tengo para pagar ésto ni de cachondeo... qué sensación más mala, la de encontrarte desamparao en este aspecto en el extranjero... bendita seguridad social española por muy mal que esté. Conseguí algo de dinero extra por si tenía que hacer frente al gasto y seguí reclamando al seguro el pago del ingreso. El sábado me dan de alta, pero el hospital no me quiere dejar salir hasta que no pague, por lo que la empresa se presenta como aval mío para que me dejen salir. Así que el sábado 3 de noviembre salgo del hospital después de "padecer" enfermedad y consecuencias, Consoli me llama para felicitar a Sonia y Lorenzo que se acababan de casar, yo sabía que todos mis amigos estaban juntos y yo lejos, así que cuando escucho la voz de Lorenzo me encano a llorar como un jodío Magdaleno, que hasta seguro los preocupaba porque Lorenzo no paraba de preguntarme el día de su boda: "Vicente estás bien de verdad?" y yo sin querer contarles todo el periplo un día tan especial. Supongo que fue el modo en el que mi mente explotó de tantas sensaciones encontradas.

Inma estuvo en todo momento a mi lado, incluso cuando pensaba que era una gripe, se vino a Santo Domingo a cuidarme, cuando me dejaron ingresado en Bávaro se vino en el bus del día después y menos mal que estuvo ahí en todo momento, pues no sé qué hubiera pasado de haberme encontrado completamente solo.

El caso es que a fecha de hoy 14 de noviembre, puedo decir que Ocaso sigue sin pronunciarse al respecto, aunque puse mi reclamación por teléfono y escrito, adjuntando mis documentos como no residente y mi empadronamiento en Valdepeñas, etc... pero les dejaré hasta finales de semana. Esta mañana me llama el hospital y me dice que el seguro de la empresa se ha hecho cargo de los gastos, a excepción de 10 pastillas de paracetamol, 10 de omeprazol y una botella de agua... manda webos la gilipollez. Esto era algo que no me esperaba, porque como el día del ingreso y del alta no tenía aún seguro de empresa no pude presentar nada y lo hice a posteriori a ver si colaba... y así ha sido. Así que se me ha quitado un buen nudo del estómago y ahora a ver qué dice Ocaso y tanto si resuelve a mi favor como si no, cuando vaya en Navidad me encargaré de hacerles sentir lo mal que me he sentido yo por su incompetencia.

QUE ME VOY A ESPAÑA DEL 22 DE DICIEMBRE AL 6 DE ENERO¡¡¡¡¡¡¡ OLEEEEEE¡¡¡¡

lunes, 12 de noviembre de 2012

Mes y pico después

Vamos a ver cómo resumo todo lo vivido en estas últimas semanas.


El lunes 1 de octubre me incorporé al trabajo, un cambio bastante grande y brusco, porque el domingo por la noche me estaba despidiendo de las monjas e independientemente de lo raras que puedan llegar a ser, se creó un vínculo de amistad y fue bastante emotivo. En la empresa me sueltan una blackberry y una peugeot partner de momento para mí, ya que estoy como supervisor (vaya supervisor¡¡¡¡) en la obra del hotel Bahía Príncipe en La Romana es decir, que no tengo ni que coger la herramienta si no quiero, me ocupo de que todo se desarrolle conforme la propiedad quiere: fabricación, soluciones, montajes..., pero de momento y hasta que me busquen un alojamiento más cerca, estoy viajando de Bávaro a La Romana y a Santo Domingo (casi dos horas de viaje de ida y otras dos de vuelta) a diario. La mayoría de los compañeros españoles que tengo son valencianos y bueno..., además de lo "flipaos" que están, entre ellos hablan en su puto dialecto y al no ser que yo me tenga que enterar no se dirigen en castellano, y a veces ni eso, me he llegado a encontrar situaciones de un tipo no dirigirme la palabra y hablaba con el gerente en valenciano y el gerente a su vez a mí en castellano... putos nacionalistas de mierda¡¡¡¡ manda huevos que me venga a 8000 km pa que me ocurran estas mierdas que no se las consiento ni a mis primos valencianos. Además me encuentro que las dietas no me las querían pagar, como no estoy contratado como expatriado español sino como local, ahora me dicen que los locales no se les pagan dietas, pero eso no fue lo que yo hablé con el "jefe supremo", pero después de un mes luchándolo he conseguido que se me paguen. Continúo la historia con mis compañeros, no solo de empresa, sino del resto de españoles vinculados con los trabajos que hacemos... panda de puteros hay aquí, además la mayoría de ellos con el cerebro recalentao por el sol que no sé muy bien a qué coño se han creído que vienen, por no hablar de que Bávaro es como un polígono, feo de cojones, la parte bonita la tienen requisá los resorts y fuera no quedan na más que viejos italianos y españoles con mucho dinero con negritas menores de edad, aparcando sus hummers en las puertas de las terrazas pa que niños de seis y siete años les limpien las lunas por 10 céntimos de euro.
Tampoco tengo una señal buena de internet y me siento más desconectao de mis amigos y mi familia que nunca en estos siete meses.

A fecha de noviembre se van solucionando algunas cosas como las dietas, incluso me quedo la mayor parte de la semana en mi casa en Santo Domingo. Ojalá y tuviera este puesto en España, sin todas las mierdas que  he contao claro, porque soy muy capaz de hacerlo bien. Supongo que una vez tenga ya por fin mi sitio y plante el huevo de nuevo y me compre un pincho pa el internet será otra cosa, pero me jode que con el trabajo que me ha costao tomar esta decisión, me sienta tan mal desde el principio.

De todos modos gracias a que Inma me está ayudando mucho a este respecto, estoy mirando ofertas para volver a trabajar en el área de lo social, porque sí que es cierto que lo que he hecho durante estos siete meses con las hermanas me ha llenado bastante y creo que puedo ofrecer muchas más cosas. Incluso el haber conocido instituciones y gente con mucha ganas de empoderarse y de ser participes y capaces de cambiar su realidad, es muy motivante.
Estar aquí puede parecer muy bonito pero es inegable que tengo carencias de mi gente y mi familia, por lo que creo que podría apostar por sentirme pleno con lo que estoy haciendo, aunque gane menos dinero, pero por fin apostar por algo que siempre me ha motivado.
Así que voy a ver qué va pasando en estas próximas semanas porque YA TENGO FECHA PARA IRME A ESPAÑAAAAAAAA.

Pero voy a dejar pa contar un poco en la siguiente entrada, que si no parece poco, he estado ingresado con un cuadro de dengue en el hospital...

jueves, 27 de septiembre de 2012

Y la vida sonríe...

Buffff¡¡¡ cómo plasmar en palabras lo vivido este fin de semana. Lo intentaré...

Después de casi siete meses creo que ya está bien darse una licencia y así lo he hecho. El día 27 cumple años Inma y como no podíamos estar juntos ni ese día ni el fin de semana siguiente, preparé una sorpresilla (y es que me encantan esas cosas de maquinar para los demás). Reservé el fin de semana en un pueblecito que se llama Las Galeras en Samaná, auténtico paraíso terrenal que las palabras y las fotos no hacen justicia...
Lo cierto es que la sorpresa fue para los dos, porque desde que llegamos el entorno nos fascinó, incluso el trayecto en guagua pública de la última media hora fue super chulo, la cotidianidad de la gente con nosotros, incluso la nuestra misma con ellos, que hubo hasta quien se sorprendió de lo que nos hemos "aplatanao" como dicen aquí al ambiente, la gente, las formas de conducir... La llegada al hotel fue acojonante, un agradable recibimiento entre cabañitas de cana, un jardín lleno de flores, una piscina y un mini bar al frente. Tan solo cuatro habitaciones componían el hotel y solo había 3 ocupadas. Pero es que la habitación era una pasada, cama de 2x2 con el mosquitero rodeándola, decoración con un montón de gusto, techo de palmas y cana, super limpio... Podías ir descalzo desde la taza del water hasta la playa...

(Llegados a este punto creo que se me nota demasiado que me estoy saltando algunas cosas, pero prefiero de momento guardarme ciertas intimidades)

Con respecto a las playas, sé que suena muy utópico, pero lo que describa es poco. Fina arena blanca y blanda, donde no veías apenas construcciones, tan solo algún intento de restaurante a un lado, aguas cristalinas y en la profundidad turquesas y distintas tonalidades de azul, palmeras cayendo de costado hacia el agua facilitando la sombra e Inma que es una persona encantadora que ha entrado en mi vida, a mi lado...

Las cenas fueron fenomenales, una relación calidad - precio estupenda, o quizá es que tuvimos un golpe de suerte todo el fin de semana. El sábado fuímos a un restaurante (que prácticamente era la casa de alguien) recomendados por la dueña del hotel. Nos recogieron en 4x4 y un holandés fumao nos subió a lo alto de una loma, donde al llegar al final de la casita, nos encontramos con un mirador incrustado en el acantilado de la misma. Puesta de sol sorprendente, comida sabrosísima, atención fantástica y una sazón de sentimientos... por qué no decirlo coño¡¡¡ de amor. Todo ha convertido estos días en un fin de semana tan perfecto que casi da miedo.

La vida me sonríe, me da una oportunidad laboral y profesional nueva, me ha puesto en el camino a alguien con quien soy muy feliz y puedo compartir mucho más que simples comentarios... y claro que todo esto me da miedo, porque no sé lo que pase a partir de ahora, no sé con certeza donde me ubicaré, no sé cuándo ni cómo podré ver a Inma... pero todo esto no me puede hacer mirar hacia abajo intentando discernir cuándo me voy a caer de esta realidad, sonrío yo también a la vida y no juego a predecir el futuro, sino a vivir este presente y lo que me depare después... ya se verá.
En yola hasta Playa Rincón


Playa Rincón

Catalogada como una de las cinco mejores playas del mundo

Luciendo el chinche peludo

Puesta de sol en El Cabito

Inma y yo

Las fotografías no hacen justicia

Pa que entre la cena...

Camino a La Playita

No es coña, se llama playa La Playita

Casi increíble



lunes, 17 de septiembre de 2012

Dando perspectiva a la nueva perspectiva... (2)

La decisión no ha sido fácil por todo lo que conlleva: el no volver a España cuando yo quiera, el plantearme mi vida aquí, aunque sea a corto plazo pero tengo que volver a rehubicarme en este país, el volver a alejarme temporalmente de toda mi gente, el renunciar compartir muchas cosas con los míos... Pero también he hecho un ejercicio de "perspectiva de futuro", de lo que supondría volver de nuevo a España en este momento: gastar el paro, quedarme en casa por miedo a no gastar mucho dinero, precios más altos de las cosas, incapacidad de encontrar trabajo o si encontrara algo posiblemente no sería en Valdepeñas, y marcharme a Madrid, Barcelona o Bilbao no deja de ser otra manera de volver a comenzar. Intentando ver el próximo año y pico por delante hacía balance con las dos perspectivas: si me voy para España habré gastado mi dinero, no habré podido sobreponerme económicamente al desastroso 2011, y habré hecho un par de cursos en los que seguir formándome; si continúo por Dominicana como mínimo tendré en mi currículum la experiencia laboral de una temporada trabajando en el extranjero en el sector que controlo, a penas sin haber percibido prestación por desempleo, continuando mi formación con algunos cursos a distancia que tengo en mente, recuperando en parte los ahorros mermados de estos meses de atrás y sin tener que desaparecer de la noche a la mañana de las nuevas realidades personales que estoy viviendo estos últimos meses y que me llenan y complementan.

La conversación con mi familia no fue mal, sabiendo que la noticia no era buena del todo, pero tampoco una sorpresa inesperada, me sentí reconfortado cuando enseguida comenzaron a darme palabras de apoyo y de entendimiento a mi decisión, tanto mis padres como mis hermanos. Todo eso ha sido muy importante para mí, ya que no sabía cómo dar la noticia y aunque siempre he partido del respeto a mis decisiones, soy consciente de lo que supone quedarse aquí un tiempo más. Con toda mi fortaleza y decisión, hubo un momento donde se me rompió la voz en la conversación.... hala Vicente¡¡¡ échate unas lagrimillas¡¡¡ pero no trascendió a más el "coitos interruptus", de hecho fueron mis padres los que me cambiaron de conversación para normalizar la historia (técnica que yo utilizo muchas veces en situaciones tensas).
Con Sonia y Lorenzo no me quedé mucho más tranquilo, les prometí compartir con ellos el día de su boda y ahora por elección mía no podré cumplir la promesa, ya que el viaje a España tendrá que ser para Navidad y no para el 3 de noviembre. Tenía urgencia de hablar con ellos, porque una vez dicho a mis padres, sé que la noticia se iba a extender y debía comunicarlo yo directamente. Lo solté un poco a bocajarro y a pesar de recibir una total comprensión a mi decisión, no me dio tranquilidad cuando colgamos... coño si ni siquiera les pregunté qué tal fue la cena con los amigos cuando les comunicaron la fecha de la boda¡¡¡¡ Supongo que la sensación fue porque tenía más prisa en decirlo y llenarme de justificaciones que en tener una conversación normal con mis amigos.
(Lorenzo, sé que esto lo leerás en algún momento y no hago esta reflexión porque vaya a ser así, sino porque necesitaba escribir de una vez todas las sensaciones de estos últimos días, porque me ayuda a poner orden a todo lo que tengo ahora por delante.)

Y a partir de ahora muchas cosas... dejar claro cómo voy a ayudar a las hermanas a partir de ahora, porque no las voy a dejar tiradas, haré con ellas como he hecho siempre con la ONG en España, darles la noticia a las comunidades con las que trabajo, intentar no dejar muchas cosas abiertas, aclarar dónde voy a plantar el huevo, volver a hacer las maletas y comenzar una nueva perspectiva desde la perspectiva que comencé en Dominicana.

Dando perspectiva a la nueva perspectiva... (1)

Tenía muchas ganas de tocar este tema en el blog y es que no lo he hecho antes por causas obvias. Debía dar perspectiva a la nueva perspectiva que se presenta y sobre todo quería hacerlo de la manera menos desacertada posible es decir, una vez tomada la decisión y clarificada en cuanto a condiciones y mi próximo viaje a España, debía hablar: con mi familia y después con Sonia y Lorenzo, por distintas razones pero por la misma.

Lógicamente desde que vine tenía claro que no iba a dejar escapar la oportunidad de intentar "vislumbrar" una posible oportunidad laboral en República Dominicana, ya que la situación laboral en España fue la que en gran medida me trajo aquí dándome la oportunidad de dar un nuevo enfoque, una nueva perspectiva a la apatía y desazón que me provocaba el no trabajar y el "no saber" qué pasaría con mi futuro a corto plazo. Así sabía que debía mirar nuevas oportunidades laborales en Dominicana.
A finales de agosto tomé la decisión de comenzar mi pequeño sondeo, ya que este es un país en el que todo va "al paso" y pueden pasar meses desde que alguien te dice que está interesado a que te puedan llamar. Pero asombrosamente en mi caso todo ha ido más rápido de lo esperado. A través de Melvin, quien me recogió en Punta Cana a mi llegada al país y a través de la hermana de mi amigo el catalán que conocí en el Camino de Santiago, hice llegar mi currículum a tres empresas, dos de las cuales se pusieron en contacto conmigo inmediatamente... vamos de un día para otro. Estaban muy interesadas en mi perfil y están en un momento en la empresa en la que necesitaban a alguien con experiencia en el sector del aluminio.
Una de las entrevistas era para una empresa aquí en Santo Domingo, que acaba de constituirse como sociedad, aunque algunos de sus componentes llevan ya muchos años en el tema de la construcción, les gusté bastante y me propusieron que incluso formara parte de su sociedad porque iba a ganar mucho dinero con ellos... dos frases que unidas no me terminan de cuadrar, porque ni tengo solvencia como para hacer frente a una sociedad y no soy amigo de ganar dinero rápido (maldita primitiva...). El caso es que después de varias citas canceladas por ellos, mañana vuelvo a verles y lógicamente les voy a decir que no de la manera más cortesmente posible, ya que este no es un país grande y nunca sabes qué te deparará el futuro.
La otra empresa es española, de hecho los días de la entrevista les vino muy bien porque el jefe (un valenciano) estaba en el país y así me podía conocer. Hice una entrevista muy tranquila, no tenía nada que perder y sí bastante que ganar (el tiempo aquí también me ha aportado mucha calma interior), les gusté bastante y tuvieron una deferencia que me llamó mucho la atención, porque me invitaron a Bávaro a conocer la empresa, así que así lo hice, pasándo un par de días en Bávaro y de camino de vuelta a Santo Domingo en La Romana. Conocí las oficinas, el almacén, el taller y las obras de Bávaro y La Romana, es más incluso me vi metido en una reunión con la propiedad (Barceló Hoteles) en un resort que tienen en La Romana. Me propusieron que necesitan informatizar el almacén y por supuesto optimizarlo, llevar un control de todo el material y accesorios que importan desde España, además de dar un giro al taller que tienen, pues no existe una figura "responsable". Todo ese trabajo creo que lo puedo hacer bastante fácilmente, ya que en España he hecho cosas bastante más complicadas, pero la urgencia que tienen (y creo que esta idea se les presentó después de conocerme) es en la obra de La Romana, porque están en plena época de ampliaciones y construcciones en los resorts.
Tras plantearme las condiciones que me parecieron buenas, en las que se incluye la vivienda y un viaje anual a España, y estar varios días pensando qué sería lo mejor, les he dicho que sí, así que el uno de octubre comienzo con ellos. Aún no tengo definido si comenzaré directamente en La Romana o tendré que irme de una vez a Bávaro, esta es la parte que más pereza me da, volver a hacer las maletas y plantar el huevo en otro sitio. Pero lo cierto es que tengo ganas de comenzar y ver qué tal me defiendo en esta nueva realidad que he elegido vivir.

martes, 11 de septiembre de 2012

Confuncio… ah no¡ Confundío


Hace mucho que no retomo el blog, y no es porque no tenga cosas que contar porque en realidad sí que son muchas, pero hasta que no les de forma no veo prudente el ir anotándolas y compartiéndolas.

Pero seguro que una pequeña chorrada (ahí va qué chorrazo¡¡¡¡) nos hace sonreir un poco.

El tema es que desde hace algunos meses estaba dándole vueltas a una percepción que tenía en la casa de las monjas. Para ir al grano y no darle más misterio, lo que ocurrió es que un día mientras estaba esperando que la lavadora acabase, me estaba echando un cigarro y paseando por la terraza donde lavo mis cosas, cuando al mirar hacia abajo donde las hermanas tienen un pequeño terreno dedicado a huerto, me di cuenta que había un montón de plantas de marihuana… ¡Joder con las monjas, qué callao se lo tenían¡ pensé yo, una de dos o las monjas tienen aquí sus “remedios” o alguno de los trabajadores de la casa tiene aquí su negocio. Pero claro, yo en mi cabecita que siempre va más allá, lo que realmente pensaba era en enterarme del propietario del plantal para pedirle unas cuantas plantas y volver a recordar ese fresco aroma a campo… jejejeje.
Después de unas cuantas investigaciones pregunté a uno de los trabajadores que tiene acceso al huerto, y haciéndome el tonto le pedí que me hablara de “las matas” como llaman aquí a las plantas, porque eso es otra cosa, aquí no existen cocoteros, ni vides, ni melocotoneros… aquí todo son matas: la mata de piña, la mata de guayaba, la mata de guineo, la mata de uva… . A ver que me voy de tercio jejejeje, el caso es que una vez en el huerto, ya noté que aunque las hojas sí que eran de marihuana, la planta era algo distinta, pero yo en mi afán de fumarme hasta los tronquillos de las jaras, pensé que eso se debía a que eran porque estamos en el Caribe. Pero mi chasco fue grande al enterarme de que no eran plantas de marihuana sino de yuca… que sí que está muy rica, pero no te la puedes fumar… vaya tela¡¡¡¡

Adjunto envío material gráfico para respaldar mi historia y no quede todo en fruto de mi ignorancia.


Hoja de la Yuka

Hoja de la marihuana


Marihuana procesada
Yuca cocinada





domingo, 19 de agosto de 2012

Tiempo de aguacates

Y es que en esta bendita tierra no se para de comer buena fruta que generan desde las explotaciones agrarias a los más pequeños rincones en algunas de las casas. El clima, la lluvia, la tierra y el sol son excelentes para que la naturaleza sea generosa y abundante. Supongo que gracias a eso no se pasa más hambre en este país.
Ahora es tiempo de aguacates y en la vida había probado algunos tan buenos como los de aquí. Solos con aceite y sal y mezclados con mangú (una especie de puré de plátano maduro sancochado con cebolla), en la sopa, en la ensalada o simplemente metido en un bocadillo de salami y queso, está delicioso, por no hablar de lo limpio que tengo el colon con tanto consumo de fruta.
La lechoza, que es nuestra papaya, en la mañana tiene un sabor estupendo para desayunar. La piña tan dulce que se da en el Caribe, que puedes oler el agradable aroma de un camión siendo descargado desde unos diez metros antes de llegar. Y si me pongo a hablar de los plátanos no paro, mil y una manera de cocinarlos, mil y una variedades de los mismos, la última que probé el guineo manzanillo, como el plátano nuestro pero en miniatura, y con un sabor intenso, como si fuera un postre preparado. Los limones dulces, la chinola, el melón naranja que se da aquí... todo ésto sacado directamente de la mata.
Platos elaborados que no tienen desperdicio ninguno: arroz con con-cón, y aún me gusta más el arroz moro, que es el mismo arroz pero acompañado de habichuelas negras o guandules (una especie de lenteja grande), pastel en hoja (como una empanada que se hace con masa de maiz o de guineo y se rellena por lo general de carne, se envuelve en hoja de plátano y se sancocha), Yanikekes que son la traducción dominicana del Johny Cake inglés y que lo suelen vender en las esquinas. La yuka bien cocida con cebolla o en pastel está deliciosa.
Por supuesto que también hay cosas que no me terminan de convencer: la carne la sazonan mucho, se come por lo general poco pescado y marisco (la poca industria pesquera y la contaminación del mar son las causas del caro precio del pescado), el pan español no el pan de agua de aquí. Y otras muchas cosas que echo de menos, sobre todo el embutido español. Pero es aquí donde estoy y donde estoy disfrutando y aprendiendo a saborear esta parte de la cultura que no hace falta que lo diga, pero me encanta comer... joder, ya estoy salivando.

Fin de semana también trabajando, pero ya no tanto por obligación sino por ganas de ir acabando cosas. Voy a tener que quitarme la costumbre de trabajar fuera de mi horario...
Creo que entre hoy y mañana viene Inma de nuevo y el fin de semana que tiene que volver para la capital, haremos alguna escapada... ya se me ocurrirá algo, que ideas tengo mil.

lunes, 13 de agosto de 2012

Reuniones y reuniones...

Llevo como algo más de quince días que no me llego con las manos al culo, y es que para el cinco de agosto las Salesianas tuvieron las consagraciones de nuevas hermanas y los cambios anuales, por lo que me tocó echar una mano en preparación de documentos, películas, reportajes fotográficos y demás. También en esta última semana han tenido las reuniones de las nuevas Comunidades más la próxima reunión de la Verificat en New Jersey, por lo que "aquí está Vicente pa preparar y preparar". El caso es que todo ésto me ha dejado poco tiempo para dedicarme a mi trabajo que lo tengo bastante abandonado y tengo que seguir dándole seguimiento. Lo positivo de estos días es que he tenido un par de reuniones, una con el Consejo Provincial y otra con las Comunidades, para explicar los logros de la Oficina de Proyectos y el trabajo que se está haciendo, y han sido muy positivas, pues las hermanas han sido bastante receptivas a mis propuestas de planificación, consenso e instauración de un flujo de comunicación "oficial". Aproveché también para enseñar los documentos que he creado para la Oficina de Proyectos y la idea de que el camino que se ha de seguir es el de convertirnos en Oficina de Planificación y Gestión, más que en Oficina de Ayudas Puntuales. Creo que me he ganado el respeto de muchas de ellas, que no tenían muy claro qué era lo que yo estaba haciendo exactamente aquí. También he logrado terminar un vídeo con la casa de las hermanas mayores que tenía en mente desde que llegué, con el fin de abrir un nuevo camino, buscando apadrinamiento y por tanto financiación para dicha casa. El vídeo no ha quedado tal y como yo quería, pero hasta que lo vuelva a modificar, creo que es un instrumento más para llegar a tocar corazones y puertas e intentar ir arrancando cierta "responsabilidad social" de las ex-alumnas para con las que fueron sus maestras. Voy a ver si puedo subirlo al youtube para que lo veáis.

http://www.youtube.com/watch?v=ltEA3R9TZxM&feature=youtu.be

Con respecto a la casa, creo que mejor imposible, por fín he encontrado un lugar donde sentirlo como mío y hacer así la separación que tanto necesitaba del tiempo que paso colaborando y mis propios momentos. En realidad no hago nada más especial que lo que hacía cuando vivía con las monjas: termino de cenar con ellas y luego me voy a mi casa a ducharme y ver una película o leer, porque como a las seis de la mañana estoy ya en pie no se me hace muy tarde en acostarme. Pero al menos no tengo que andar dando explicaciones ni pidiendo permisos cuando quedo con alguien... libertad e independencia.

Por lo demás bastante bien, siendo consciente de que he entrado en tiempo de descuento y que tengo que empezar a sopesar si me vuelvo para España a cobrar mi paro, me quedo y me busco un trabajo o lo mando todo al carajo y sigo de trotamundos... (lo último ni me lo planteo). Pero sí que es cierto que no quiero agobiarme todavía con todo ésto, pero tengo que hacer algunos contactos serios con algunas empresas y entonces poner en una balanza lo que tengo aquí si me quedo otra temporada y lo que tengo en España... y ésto no es fácil, si todo se resumiera a lo económico no habría tanta complicación, pero tengo demasiadas emociones y sentimientos como para ser muy objetivo.

Con Inma (la de la frontera en Jimaní) he pasado unos días geniales, incluso estuvimos cenando la otra noche con Amadeo y Jesús, dos curas manchegos... vamos tan manchegos que Jesús es de Valdepeñas del barrio de Cachiporro "¡¡¡ Arriba cachipurrianas!!. Estuvimos paseando, visitando, riendo... muy agustito.

Aquí os dejo unas fotos de una actividad que tuve con la Pastoral Materno Infantil en Bonao, haciendo visitas a las futuras y recientes madres y sus niños. Me encanta esta labor porque me permite acercarme mucho a la gente y el contacto es fundamental.








martes, 31 de julio de 2012

Muchas cosas...

Se me han pasado quince días sin poder escribir y ahora no sé por dónde comenzar. Cada vez me alegro más de haber comenzado este blog, porque ahora que es cuando me siento para escribir, me doy cuenta que hay muchas percepciones diarias o "cotidianidades" que cuando pasan los días se diluyen en los recuerdos, y gracias a este diario, me aseguro que no se pierden.

Comenzaremos con mi regreso de los días pasados en Las Terrenas y cómo la buena experiencia y los sitios tan chulos que conocí, se empañan por experiencias no tan buenas.
Cuando llegué de Las Terrenas, recogí algunas cosas y me fui con una mochila a casa de Ana Belén (una amiga española que creo que ya he hablado alguna vez de ella), se había marchado a España durante diez días y me pidió que me ocupara de su casa en su ausencia, librándome así también un poco del ambiente monjil. Bajando la calle ví un grupo de personas que no me agradaba mucho, así que cambié de acera, pero a la vez vi por el rabillo del ojo que dos de ellos venían detrás de mí. Para hacerme el despistao me paré un momento como para coger algo de la mochila y les faltó tiempo para colocarse uno delante y otros detrás de mí. Mientras uno me quitaba la mochila, el otro me vaciaba los bolsillos. No puse resistencia, pero sí que les pedí que me devolvieran la documentación (una tarjeta de crédito y la licencia de conducir) pero me amenazaron echándose mano a una pipa en la espalda. Posiblemente no iban armados, pero no lo quise comprobar. Al momento se acercaron otros tres para preguntarme si me habían robado, que me podían ayudar, pero que les tenía que dar algo a cambio. Todo estaba compinchado, me dí cuenta perfectamente, pero también vi que si quería recuperar algo esa era la manera. Así que resumiendo, recuperé la mochila con la ropa y la documentación, perdiendo los dos móviles (el español y el dominicano), el dinero y algunos calzoncillos y cosas de aseo.
No dejo que esto me asuste, de hecho he intentado pasar cada día por el sitio que me robaron (no de noche claro) para no cogerle miedo, pues es algo que ya sabía que me podía ocurrir. No deja de ser lo mismo que si vas por un mal barrio de Madrid y te atracan, lo que pasa es que aquí son más los malos barrios. Mentalizao de que puede ser algo que vuelva a ocurrir.

Los días en casa de Ana Belén, muy bien, porque estaba en la zona Colonial y me permitía salir a pasear por la noche y tener mi independencia. Mientras las hermanas me habían buscado una casa compartida con un voluntario de los Salesianos (las salesianas y los salesianos no trabajan siempre juntos). Cuando me mudé a esa casa, me encontré que estaban cambiando los suelos, así que seguí con mis cosas en maletas. Allí vive un voluntario (más bien un trabajador) de los salesianos, un italiano casado con una cubana y que tienen una niña. A los dos o tres días me comenta que el se quería ir a vivir a otro sitio más seguro con su mujer y su hija, pero que la agencia con la que viene no estaba por la labor de pagarle otra vivienda, que esa casa se iba a convertir en la casa de la familia, por lo que yo quedaba fuera. No me alteré ni mucho menos, así que recogí mis cosas a los pocos días y me vine de nuevo a casa de las monjas. Todo esto es molesto por el hecho de tener mis cosas en danza de una lado para otro y sin ubicarme y poder plantar el huevo en un rincón que sienta como mío, pero este tipo de vida (temporal) es lo que conlleva... no tener sentido de pertenencia.
Lo bueno es que ayer pude llevarme mis cosas por fin a una casita de una ex-alumna justo aquí al lado de donde trabajo, donde creo que podré pasar el tiempo que me quede. La casa es minúscula, una construcción peculiar (cuando pueda colgaré un video para presentar el chozo), pero os aseguro que comparado con los lugares donde viven muchas personas, soy muuuuuyyyyy afortunado.

He intentado resumir un poco estos quince días, me queda por ahí alguna cosa en el tintero, como una reunión que tuve con el Consejo Provincial Monjil (que fue muy importante para mí) y la experiencia con la Pastoral Materno Infantil en Bonao, pero eso es harina de otro costal y será material para la siguiente entrada.
De momento un par de fotos de los días en Las Terrenas. Las fotos son de los momentos que no trabajábamos, que parece que siempre estoy de excursión...

El salto del Limón

Playas en Las Terrenas... auténticos Paraísos Terrenales

jueves, 12 de julio de 2012

Conversaciones disléxicas

Porque aunque hablemos el mismo idioma, existe una barrera cultural que limita los entendimientos, y hay en ciertas ocasiones que se me hace cuesta arriba hacerme entender, e incluso captar yo también a la primera a dónde queremos llegar en una conversación o una reunión.
Como muestra un botón: tengo la intención de darle un giro a la Oficina de Proyectos y pasar de que sea un "garito de búsqueda de ayudas" pueda servir como una herramienta que ayude al resto de las áreas donde trabajan las salesianas, para producir verdaderos cambios o "desarrollos". Bueno, pues tras explicarle a la sor que tengo en la oficina la intención, para comenzar a trabajarla a partir de la semana que viene, pues tentemos que presentarla al Consejo Provincial el día 27, acabo mi explicación y me contesta: -"sí, así podemos enseñarles una oficina con sus propios logos que nos den diferencia..."- y todo lo que le había estado explicando durante los diez minutos anteriores???? el dar un cambio desde dentro, no solo a la idea original cuando se creó, sino a la idea que las hermanas tienen en la cabeza de lo que ésto es y lo que debería ser. Así que miedo me dan los próximos quince días, porque además de desarrollar la idea con esta monja, hay que explicarlo a las demás, y lo más grave... que me entiendan.

Estos días estoy en Las Terrenas, una pequeña localidad de la provincia de Samaná (la novia del Atlántico), de una belleza incalculable, playas paradisíacas de arena blanca, aguas cristalinas y palmeras callendo sobre el paisaje... sí, sí justo como las postales. En la tarde hacemos talleres con los niños y jóvenes, quedándonos así la mañana para disfrutar en la playa. Acepté la invitación porque aunque tengo mucho trabajo en Santo Domingo, necesitaba quitarme un poco de en medio de allí, llevaba mucho tiempo sin salir y el movimiento reiterativo monjil va, monjil viene, me cansa bastante. Así que por aquí estaré trabajando y disfrutando hasta el domingo que vuelva.

A la vuelta me voy a vivir diez días a casa de una amiga española que se va a pasar unos días a ver a sus padres y me ha pedio que si le puedo cuidar de la casa. Así que lo voy a hacer así, ya que también está muy cerquita del trabajo y en la misma Zona Colonial, sitio seguro y con mucha vida.
De todos modos cuando acabe esos días en casa de Ana Belén me mudo por fin fuera de la casa de las monjas... YUJUUUUUUUUUU¡¡¡¡¡¡ pero eso lo contaré más despacio en otra entrada y cuando tenga claro más cosas.

Mañana viernes operan a mi padre y no me hace mucha gracia el que me haya pillado fuera, de hecho una de las motivaciones para venirme ahora a República Dominicana era que la operación se preveía para el año que viene. Me alegro que se lo hagan ya porque le duele bastante, pero les dejo todo el turrón a mis hermanos, aunque sé que no tengo por qué preocuparme.

jueves, 5 de julio de 2012

Redefiniendo

Es curioso cómo va cambiando mi perspectiva de estar aquí, en general por todo y en particular en el trabajo. Y es a eso en este momento a lo que me quiero referir.
En un principio Vicente viene a la recién creada Oficina de Proyectos de las Hijas de María Auxiliadora en la Provincia Antillana de San José, que concierne a República Dominicana, Cuba y Puerto Rico, y me encuentro una oficina que parte de cero. Comienzo analizando los "proyectos" que hay en cartera e inmediatamente después a implementar la oficina con herramientas que sirvan para que la persona que esté en cualquier momento al cargo de la oficina, pueda utilizar para nunca partir de la nada. Una vez hecho ésto, me encuentro en la fase de buscar ayudas para distintas necesidades que hay en las obras de las Salesianas, pero a la vez me doy cuenta de varias cosas: lo que se busca son ayudas puntuales para necesidades puntuales, mejoramientos de ciertas áreas y una concepción de que la oficina de proyectos se ocupa tan solo de buscar fondos para las necesidades que las hermanas estiman. Ésto es una tarea ardua difícil, debido principalmente a la situación económica que se vive a nivel mundial y que afecta de una manera muy directa a las ayudas destinadas a estos países, hecho que me ratifica en el pensamiento de que debo enfocar mi trabajo en otra dirección más y creo que más importante. Hay que dejar muy claro si lo que pretendemos es buscar ayudas económicas puntuales para ciertas cosas, o lo que queremos es crear "desarrollo" en las áreas que toquemos. Claro está que esta segunda opción implica mucho más trabajo y un cambio en el chip de nuestras pretensiones.
La Oficina de Proyectos debe de ser (a mi criterio y creo que no voy muy desencaminado) a convertirse en una herramienta transversal al trabajo que las hermanas realizan en la Provincia de las Antillas, bien con los niños, bien con los jóvenes más desfavorecidos, que son la principal área de actuación por carisma de las Salesianas. Es decir, a partir de las necesidades que las Pastorales infantiles, de jóvenes, de formación, etc... detecten en su entorno, comenzar un trabajo de identificación, valoración y puesta en marcha de ideas, dando forma así a un proyecto, quizá más ambicioso que la simple adquisición de un útil, pero que se pueda convertir en una tarea o "Proyecto" que realmente transforme esa precariedad o necesidad o carencia, como queramos llamarlo, siendo así capaces de modificar la sociedad con esa aportación.
Por otro lado, hay que cultivar la idea de que nuestras necesidades son eso "nuestras" y la sociedad o la comunidad que nos rodea, tiene su parte de responsabilidad social, para con los suyos, intentando crear conciencia de que podemos y debemos hacernos cargo de ser nosotros mismos con nuestros recursos, aportaciones y trabajo los que nos toca cambiar nuestro entorno, haciéndonos así parte y beneficiario en el proceso de mejorar nuestra sociedad. Para aquello que necesitemos financiación, se buscará.

No sé si lo he explicado bien, pero tengo la idea en la cabeza y debo escribirla y ahora darle forma para plantearla aquí, porque posiblemente sea el mejor trabajo que pueda dejar, una oficina con herramientas básicas para comenzar a trabajar y un pensamiento de a dónde nos queremos dirigir, ya que se ha hecho una apuesta por crear este espacio, démosle forma ahora.

lunes, 2 de julio de 2012

Mixto de jamón y queso

Hace algunos días que no escribo, y es que no siempre es interesante todo lo que pasa.

De nuevo tuve una discusión bastante dura con la monja con la que gestiono las cosas aquí, y es que se unió el hecho de que siguen sin encontrarme nada donde alojarme más un par de problemillas con la sor con la que llevo la gestión de la oficina de proyectos. Sin entrar en pormenores, el caso es que al menos ahora sé que sí que anda buscando en serio el sitio, y es que por aquí lo que está bien es caro y lo que es algo más económico es una mierda. Al menos he conseguido que cuando salgo, me llevo llave, pero esto lo hace conmigo así como de "strangi". Con respecto a lo del curro, mañana me sentaré con la monja para ver si ponemos las cartas boca arriba y me haga de tapón en el trabajo, que más que ayuda, en la mayoría de las ocasiones me limita todo lo que hago. Pero bueno, eso lo arreglo mañana.

Las clases de baile me gustan un montón, de hecho ya estoy acabando con bachata y comenzaré en breve a aprender salsa. Y es que la profesora (aparte de estar más buena que el pan de rosca) me ha cogío mucho cariño y me están enseñando un montón.

El fin de semana estuvieron por aquí mis amigos de Jimaní y por la noche me fui con Inma a una fiesta que daban en el sitio donde voy a aprender a bailar. El caso es que parecía que lo íbamos a pasar toda la noche bailando, pero llegó un momento que nos agobió bastante el estar sudando como pollicos al vapor y decidimos irnos hacia la zona Colonial a tomar algo. Pasamos a la casa de teatro y tuvimos la suerte de que había música en directo de gratís... un cubano cantando Mercedes Sosa, Silvio Rodríguez... me acordé mucho de Mateo, que hubiera disfrutado lo más grande, e Inma también lo estaba pasando genial. A mí antes me gustaba mucho este tipo de música, pero desde que aprendí cual era la manera correcta de cortarse las venas, dejé de escucharla, porque lo poco agrada y lo mucho te puede conducir a suicidio. No estoy yo para tanta ternura concentrá.

Pudimos disponer de coche gracias a Ana y nos fuimos a recoger al otro compañero de Jimaní, una amiga dominicana de ellos y Ana Belén, la española con la quedo algunas veces. El caso es que no sé cómo me las apañé que junté a todo el mundo en casa de los mercedarios (que también son españoles) y estuvimos viendo el fútbol, con su correspondiente botella de Viña Albali, tortilla española, chorizos y morcillejas... joder el tiempo que hacía que no repetía una morcilla, y lo que me gustó repetirla hasta la noche. El partido, qué contar? disfrutamos como "criaturicas" y además luego pude hablar por teléfono con: mi hermana, mi cuñao, Lorenzo y Fernando. A decir verdad, me trastoca un poco cuando hablo con tanta gente de España, son muchos sentimientos, buenos todos, pero muchos a la vez, pero no lo cambio por nada, escucharte a lo lejos y compartir momentos únicos, no solo porque ganara España, sino por la complicidad que existe habiendo de por medio ocho mil kilómetros. Me emocionan creo que demasiado esas cosas, pero no pienso renunciar a que siga siendo así, me hace seguir siendo consciente del cabo que tengo atado y del que puedo tirar en caso de necesitarlo.
Lógicamente nos fuimos a celebrarlo, y es que aquí aún quedaba toda la tarde-noche para celebrarlo. Nos fuimos de nuevo a las ruinas de San Francisco, como dice Ana Belén "a la verbena tropical" y estuvimos bastante bien. Ocurrió algo de lo más curioso y es que comenzó a llamar gente de la que conozco aquí y en un momento junté a toda al gente (que no es mucha) que conozco y con quien tengo más relación aquí. Nadie se conocía entre sí, lo único que tenían en común era yo, pero eso era lo de menos. Pasamos un buen rato.

Ana Belén me propuso algo y lo cierto es que me agrada bastante. En julio se va para España durante diez días, aquí tiene una vivienda pequeña, que comparte con un gato y unas plantas. El caso es que me ha pedido que si me puedo hacer cargo de ellos, mudándome durante estos días a su casa. Por supuesto que le he dicho que sí, mientras estas mujeres buscan algo, así al menos me libro de la vida monacal durante un tiempo.

lunes, 18 de junio de 2012

Bastantes cosas (3) La Cárcel de la Victoria

Además de ser el nombre de una película, que por cierto es una castaña pero donde se puede ver realmente las condiciones de vida en este sitio, es el nombre de una de las cárceles que existen en Santo Domingo. Los Mercedarios ya me habían invitado anteriormente a hacer una visita con ellos, y es que es uno de los trabajos que realizan dentro de su pastoral, visitar gente en la cárcel.
El jueves pasado fué el día que decidimos y me fuí para allá, junto a una francesa que es voluntaria con ellos, uno de los mercedarios y yo. La función de esta gente allí normalmente es la de "acercar a Dios un poco a sus vidas", pero en la práctica esto se reduce a un "simplemente estar" y es que aquí nadie se fia de nadie, y el mismo hecho de una constancia semanal, de alguien que pase un rato de conversación con ellos, o les pueda echar un cable en resolver alguna historia de: conseguir medicamentos, o dar una noticia a alguien, o resolver algo de documentación, es algo grande dentro de este sub-mundo. Digo bien lo de sub-mundo, porque dentro de las distintas realidades que ya he conocido por aquí, lo que se vive (o lo que percibo se pueda vivir) es algo que está un grado más por debajo.
Aquello es como una pequeña ciudad, con sus negocios de venta de comida, ropa, calzado, porno... sin ocultarlo a la vista de nadie, lo hacen entre los mismos pasillos. Por lo tanto, dentro necesitas dinero para todo: para conseguir que te cambien a un pabellón mejor, para conseguir una cama, para conseguir unas maderas para hacerte tú mismo la cama, para conseguir unas zapatillas... y como he dicho antes, nadie se puede fiar de nadie, pues los chivateos o las venganzas entre las mismas pandillas que existen dentro no son cosa extraña. Todo ésto ubicado en una construcción de hace no sé cuántos años y en unas condiciones entre lamentables e insalubres.
Parece que estoy exagerando, e incluso parece que estoy describiendo alguna película de prisiones latinoamericanas, pero es real porque lo ví, aunque ahora yo también lo recuerdo como algo que me hubieran contado, porque la experiencia fué bastante rara. Llegas allí, de visita, blanquito, sin intención de hacer nada en particular, tan solo conocer y después coges tu camino de regreso y te vienes a comer a tu casa como si no hubieras visto nada, pero claro, algo así no te puede dejar indiferente. Lo cierto es que podría plantearme el realizar visitas semanales, pero no me veo suficientemente capacitado para ello.

jueves, 14 de junio de 2012

Bastantes cosas (2)

El domingo me dejó el coche Ana, así que aproveché y llamé a unas chicas que conozco (una española y la otra estadounidense) para irnos a la playa, y pasamos un día bastante bueno: risas, cervezas, sol y mar caribe... A excepción de la comida, que nos pegaron una sablada que te cagas, pero la culpa fué nuestra, ya que no sumamos a los precios de la carta el impuesto del 16% y el otro del 10% de propina que ya viene en la factura, pero bueno, me ajustaré más con otros gastos. Al menos me consuela pensar, que en algún momento me quitaré de fumar, porque aquí no fuma casi nadie y porque esos gastos van de mi bolsillo...
A la vuelta de la playa, dejamos a la americana en su casa y yo me quedé con la española dando un paseo por la Zona Colonial, para ir después a las Ruinas de San Francisco, donde todos los domingos desde hace unos cuantos años, se juntan grupos de: son, merengue, salsa... y hay musiquita en directo, la gente sale a bailar, te tomas tu cervecita, puedes comprar para cenar yuca y comida criolla, vamos como una berbena nuestra, pero con un encanto chulísimo, porque el entorno de las Ruinas de San Francisco es bastante atractivo, además de ser un lugar de gente sencilla y donde no te tienes que preocupar mucho de si te van a robar hasta el alma...

http://www.youtube.com/watch?v=NOEQVUfzJeQ

Lo cierto es que disfruté mucho y va a ser un sitio donde pasar muchos domingos por la tarde.

El lunes hice otra visita con la pastoral Materno Familiar, bajamos a la Ciénaga, que ya he hablado varias veces de esa zona y me vuelvo a constatar en lo dicho en otras entradas, la gente es muy muy muy pobre y viven en condiciones muy insalubres, pero son tremendamente felices, me acogen muy bien y me encanta el trabajo que se hace y se puede hacer allí abajo. Echo mucho de menos el contacto con la gente, ya que paso la mayor parte del tiempo haciendo un trabajo de oficina, y por eso me gusta este tipo de escapadas, de maneras de ir aterrizando en las distintas realidades que conviven en este bendito país, donde la identidad cultural me llama mucho la atención: Tierra conquistada por los españoles, quienes acaban con los nativos a través de trabajos forzados y enfermedades occidentales, trabajada por los esclavos que traen de África, espoliada por españoles, franceses, ingleses, estadounidenses... pero que también han dejado su huella en la cultura, la música, las costumbres, en la mezcla de razas, los descendientes... supeditados primero a españoles, después a ingleses y franceses, Estados Unidos también tuvo su momento de ocupación, Haití fue dueña de toda la isla durante algunos años hasta su expulsión por los dominicanos. Todo eso da lugar a esta cantidad de personas tan dispares en colores, facciones, pensamientos, pero que han ido construyendo una nación o una "patria" ( a mí no me gusta esta palabra, aunque es la que mejor describe el sentimiento general del dominicano) que lejos de sentirse como africanos desplazados y maltratados en muchas ocasiones, con orgullo cantan a su bandera y se muestran como la perla del Caribe.

Bastantes cosas...

Llevo unos cuantos días sin escribir, pero no porque no haya pasado nada interesante, pero sí porque he tenido unos cuantos días sin teléfono ni conexión a internet... y no veas lo tedioso que se hace el día y más aún la noche, sin poder conectarme. Lo sé, me he vuelto un adicto a la red, y no solo por saber de mi gente en España, que también, sino porque tampoco sé de la gente aquí en Dominicana y lo que limita mi trabajo. Aunque tengo que reconocer, que el hecho de no tener conexión, me ha hecho avanzar bastante en la redacción de solicitudes que tenía pendiente.

Así que por lo inflar mucho las entradas, las iré repartiendo en días, porque creo que las distintas vivencias de la última semana no se pueden juntar en una sola, por lo distinto de cada momento.

Ya tengo el permiso para conducir dominicano, y me ha costado sangre, sudor y lágrimas, y sobre todo viajes a la embajada y a la oficina de Tránsito Terrestre. Después de hacer una labor de investigación para ahorrarme viajes e intentar averiguar qué documentación me hacía falta, pago mis correspondientes tasas en el Consulado Español, después en la Cancillería Dominicana y tras una larga espera en migración, no me resuelven nada, porque pretenden que me haga residente y saque la cédula dominicana (nuestro D.N.I.), yo tenía cierta información de que eso no me hacía falta, ya que al no estar tanto tiempo, no tengo necesidad de hacerme residente y andar con todo el papeleo. Me voy para Tránsito Terrestre (nuestra Consejería de Transporte) y me hago el tonto, pero no me sirve y me vuelven a negar la homologación del permiso si no tengo la cédula de los cojones. Me vuelvo a ir a la embajada, vuelvo dejar el móvil a la doña de la puerta, vuelvo a esperar mi turno, y me confirman que tengo un visado que pague al Consulado Dominicano en España, con eso voy a tos sitios. Vuelvo al dichoso Tránsito, les explico ya bastante molesto lo que quiero, me dicen que no saben nada y me vaya a una oficina que se llama "judicial" y vuelvo a explicar el tema, donde me intentan decir que no, pero yo ando más astuto y le digo que MI EMBAJADA me ha dicho que he pagado a un CONSULADO DOMINICANO por un VISADO y con eso me basta, como el tipo (que tampoco tiene ni puta idea) no sabe ná, me manda a dirección, y la asistente de la puerta (que aquí cada funcionario tiene como dos o tres asistentes) me dice que se han ido a comer, que le diga a ella lo que quiero, a lo que respondo: -pero si te lo explico a tí, lo tengo que volver a explicar dentro?- , me dice: -sí, sí, dígame qué pretende-, mientras lo explico la tipa comienza a bostezar en mi rostro, yo callo y comienzo a pensar si mandarla a la mierda o a la escuela pa que aprenda normas de comportamiento, así que opto por callar y decirle que mejor espero que lleguen de comer. Tras esperar mi tiempo, paso a dirección y bastante cabreado explico por enésima vez el tema y cuando intentan darme largas les digo que me han dicho que se puede hacer y no me voy a ningún otro sitio a preguntar, de repente tras mirar una de las asistentes en el ordenador, me dice que sí que se puede y me dice los dos papelitos que me faltan, vaya!!!! ahora sí que se puede. Así que me toca un segundo viaje al día siguiente, añadiendo a la documentación una carta de las monjas como que estoy trabajando con ellas y un papel del médico pa decir que estoy mu sano. Lo llevo todo y me colocan una asistente para hacer todos los trámites vía diplomática... tócate los cojones, ahora bien rápido, en cuestión de una hora y tras sacarme sangre y pagar otra tasa más, ya tengo permiso dominicano, si total, conducen como el culo, qué más les daba habérmelo dao desde un principio.
Aunque tengo que reconocer que en el fondo me gustan estas luchas burocráticas...



Lo que más me llama la atención, es que tanto en la cédula (que no me he hecho) como en el permiso de conducir, aparece el tipo de piel que tengo y el tipo de sangre.

sábado, 9 de junio de 2012

El rol que me toca

Hace tiempo que asumí que bien por aptitudes o por actitudes, cada uno desempeñamos un rol para con los demás y creo que el mío es algo tan simple como "estar". En un primer momento parece cómodo y fácil, para qué complicarse más la vida?, pero no quiero que parezca eso ya que es bastante importante que los demás sepan que "estás" y que hay una oreja del otro lado, o una cerveza oportuna, o un abrazo cuando se necesita o una sonrisa cuando el peso es demasiado...
Desde lo lejos ahora, veo que sigo desempeñando el mismo papel, y es ahora cuando lo reflexiono, y es que a este rol creo que debo de añadir otro que no sé bien como definir, quizá como "soplo de aire fresco". Veo que el recibir de vez en cuando buenas noticias, o al menos noticias distintas de las que escuchamos en el telediario, nuevas de que aún se puede avanzar y caminar con nuevas perspectivas y ganas de caminar mirando al futuro, y esa también es un poco la idea del blog, no la idea cuando lo creé, sino en lo que se ha ido transformando, en un modo de abrir un poco la ventana y dejar entrar algo de aire fresco, como cuando duermes a la siesta y no corre ni un poco de aire, te encuentras sudoroso en el sofá y de momento cae algo de lluvia en una tormenta de verano y refresca el ambiente.
Ojalá y esa sensación sea cierta y de algún modo sea capaz de ayudar en lo que pueda y en la lejanía con mis "tontás" o con alguna peripecia monjil, o con mis reflexiones en voz alta de esta nueva oportunidad que tengo delante. Aunque no todo son risas y conocer y experimentar y aprender merengue... también existen momentos de sombras, momentos en que echo mucho de menos a mis amigos, de levantar el teléfono y llamar a alguien pa tomarme una cerveza o echar una cena en el chino, o coger a alguien para bailar cuando suena un "pasodoble" (esto lo he dicho por querencia patria), no sé... el ser consciente muchas veces también de que te estás perdiendo cosas y que al volver, inevitablemente habrá cosas que hayan cambiado, ya que el paso del tiempo es lo que tiene. Pero estas son las menos, lo cierto es que a grandes rasgos la experiencia me está siendo muy liberadora y provechosa, aún queda mucho, y aún mucho por seguir descubriendo y lo más importante, cosas por hacer.
Por ahí tengo un marcapáginas que lo elegí por la frase que ponía: "sabes que puedes contar conmigo, no una, ni dos, ni diez veces... sino contar conmigo".